Carta a las Iglesias, AÑO XX, Nº459, 1-15 de octubre de 2000

Testigos de la fe del siglo XX Asesinato de las cuatro norteamericanas Generales salvadoreñas ante los tribunales

INDICE

EDITORIAL: Testigos de los pobres y testigos de Dios

TESTIMONIOS DE VIDA: Testigos del siglo XX

REALIDAD NACIONAL: Fiscalía de la República: ¿Falsas expectativas? Más... INSEPRO-FINSEPRO

MUJER: Género y Cultura en El Salvador

COMENTARIOS: La monarquía universal

POBREZA-RIQUEZA: Ricos y pobres. Insulto y escándalo galopante

MARTIRES ESTADOUNIDENSES: 20 años del asesinato de Ita, Maura, Dorothy y Jean

IGLESIA LATINOAMERICANA: Obispos de Honduras: crimen y la violencia

IGLESIA LATINOAMERICANA: Obispos de Brasil: sobre el compromiso ecuménico

 

 

Testigos de los pobres y testigos de Dios

El siglo XX ha sido el siglo más cruel de la historia: guerras mundiales, estalinismos brutales y salvajes capitalismos de guante blanco. Pero ha sido también un siglo de hombres y mujeres, que dan esperanza y ánimo a esta humanidad desarrollada, pero cruel, pletórica de diversión, pero triste. J. I. González Faus nos recuerda a diez de esos testigos. Hagamos ahora unas breves reflexiones.

En un mundo hipócrita existe la denuncia. Muchos callaron sobre el nazismo, el capitalismo, el apartheid, el imperialismo, la discriminación racial, pero otros hablaron y devolvieron dignidad a la palabra. Llamaron a la humanidad a la honradez primigenia, sin la cual se derrumba el edificio humano. No aprisionaron la verdad en la injusticia, y sobre ellos no se reveló la cólera de Dios, sino su gracia.

En un mundo de trivialidad existe la seriedad. En contra del diversionismo, la cocalización, hollywoods y olimpíadas supermillonarias, Simone Weil renunció a comer más de lo que comían los obreros europeos en guerra –y murió de tuberculosis–. En contra de la infantilización de la religión, de procesiones, vestimentas, canciones impresentables, otro de ello, D. Bonhoeffer, dijo que "sólo un Dios que sufre puede salvarnos".

En un mundo de egoísmo existe la entrega generosa. En lugar de comodidad, Nelson Mandela pasó largos años en la cárcel. Etty Hillesujm, Gandhi, M. Luther King, D. Bonhoeffer, Oscar Romero murieron asesinados. Se repite el escándalo de la historia: se da muerte al justo y al inocente. Pero se repite también la paradoja cristiana: de esas cruces proviene luz y salvación, mayor que la de catecismos y cánones.

En un mundo de calamidades existe la buena noticia. Cada uno la hizo presente a su modo. Teilhard nunca dudó de un final salvífico, Cristo, el punto omega de la creación, aunque fuese incomprendido por su Iglesia. A Juan XXIII le bastó con sonreír, desde dentro, desde sus raíces familiares de gente pobre y humilde, para hacer presente al Dios bueno, para abrazar a todos los hombres y mujeres, sin fijarse en etiquetas –cosa tan difícil ahora–.

En un mundo de desencanto existe la esperanza. Todos, ellos y ellas, supieron decir no al presente de su mundo, pero creyeron en otro mundo mejor. Eran gentes con causas, algo por lo que vivir, por lo que luchar y por lo que morir –aunque sin morir del todo–. Hasta nosotros ha llegado el "tengo un sueño" de Martin Luther King y el "we shall overcome", más elocuente que todos los sonidos de la industria del disco.

En un mundo de tedio existe la ilusión. En los rostros de los diez testigos hay una mezcla de seriedad, dulzura, preocupación, decisión, pero en ninguno de ellos hay amargura o tristeza. En definitiva, hay ilusión. La verdad es posible, se puede construir un mundo humano y una Iglesia de Jesús. En medio de la desilusión reinante, mal disimulada por progresos insultantes para las mayorías y por artificiales carcajadas en televisión, los testigos nos dicen que sí es "posible vivir de otra manera".

Y en un mundo de poca fe se puede creer en Dios. Los testigos nos llevan en su fe. Se han puesto del lado del débil, que es la forma de estar del lado de Dios. Para los que buscan honradamente la verdad, valgan estas palabras de E. Mounier: "la verdad consiste en ponerse del lado de los pobres".

Estos hombres y mujeres, con otros menos conocidos, y con los pobres a cuyo lado se pusieron, son los grandes testigos del siglo XX. Para ellos no hay secciones fijas en la prensa, como las hay para gobernantes, políticos, economistas, deportistas, actores, cantantes. Pero ahí están. Son, a la vez, "juicio al mundo" y "buena noticia". No todos los han acogido, pero a los que les siguen les otorgan gracia y verdad, esperanza e ilusión. Les convencen de que se puede vivir de otra manera.

 

 

 


 

 

Testigos del siglo XX

Ignacio González Faus

Dejando la discusión escolástica de si el XXI comenzó ya en el 2000 o comenzará el 2001, como sostienen los matemáticos que aprendieron a contar a partir del 1, es bueno hacer balance de lo que se va, para sacar de él lo más aprovechable de cara al siglo que viene. Otros hicieron ya sus cuadros de honor del siglo que muere, y pusieron en ellos a Pelé, a Einstein o a Picasso.... Yo no voy a fijarme en genios de algún campo particular (deportivo, cultural o científico), sino en aquellos que son para mi testigos de la grandeza humana y de la mejor calidad de lo personal. Aquí van:

1. SIMONE WEIL. Judía, de familia agnóstica y acomodada. Murió en Londres, a los 34 años, por negarse a comer más de lo que comerían sus conciudadanos franceses que se hallaban en guerra. Por su radicalidad insoportable y su lucidez impactante, fue llamada "la virgen roja" durante su época de actividad. Tuvo como pocos el sentido de la belleza, y de la gratuidad de lo bello. Su identificación con los parias de la tierra la llevó a descubrir al cristianismo como "la religión de los oprimidos y por tanto la mía". Y de ahí, al encuentro con Cristo y a la fe en Él. Pero mientras confesaba creer "todo lo que la Iglesia enseña", se negó a entrar en ella porque la Iglesia "anatematiza", excluye. Y la verdad sólo puede ser defendida desde su misma debilidad. Se discute si antes de morir la bautizó una enfermera amiga, pero esto importa poco.

2. ETTY HILLESUM. Judía muerta en Auschwitz a los 29 años. Se encontró un largo diario suyo que ha sido reeditado y comentado, aunque, incomprensiblemente, no ha visto la luz en castellano. Uno de sus estudiosos dice que, de no haber muerto tan joven, habría sido el gran referente ético para todo el s. XXI, más allá de las diferencias confesionales. Su trayectoria va desde las reflexiones de una niña burguesa que duda si liarse o no con su psiquiatra, hasta el día que escribe que ha llegado a casa con ampollas en los pies, "porque ya no permiten a los judíos viajar en tranvía". A partir de ese día, un descubrimiento progresivo de la solidaridad con los sufrientes, la va llevando a un profundo encuentro con Dios, a la convicción de que el perdón es la única solución, y de que basta que haya un alemán bueno "para que no se pueda odiar a los alemanes". Desde el tren que la llevaba a Auschwitz dejó caer una carta a una amiga (que alguien recogió y envió a su destino), en la que se atrevía a expresar su seguridad en la frase del salmista: "El Señor es mi pastor, nada me falta".

3. TEILHARD DE CHARDIN. No su pensamiento (que puede tener grietas) sino la persona. Su apuesta por la tierra, encubada ya en plena guerra europea cuando servía como camillero. Su doble fidelidad (a la fe cristiana y a su profesión científica) con los enormes sufrimientos que le cuesta: desde no ver publicadas sus obras, por la prohibición del Vaticano, hasta ser enviado a China (donde, ironías del destino, encontró el homo sinensis: el esqueleto que le faltaba para probar sus teorías evolucionistas). Le retratan bien estas palabras escritas en el frente, ya en 1918: "en la medida de mis fuerzas, porque soy sacerdote, quiero desde ahora ser el primero en tomar conciencia de lo que el mundo ama, busca y padece... Quiero, por un lado, sumergirme en las cosas, mezclarme a ellas para extraer hasta la última partícula de lo que contienen de vida eterna. Y quiero a la vez, por la práctica de los consejos evangélicos, recuperar en la renuncia toda la llama celestial que encierra la triple concupiscencia: santificar en la pobreza, la castidad y la obediencia, la potencia contenida en el amor, en el oro y en la independencia".

4. GANDHI. "¿Será verdad que haya podido existir alguna vez un hombre así?", decía la película que Atemborouhg le dedicó hace pocos años. Pensamiento de una elementalidad desconcertante. Pero esa elementalidad no quedaba aplastada por más que se sentaran encima de ella todo el imperio británico o el sistema capitalista. Seguía viva y fuerte. Hasta que consiguió la independencia de la India sin disparar un solo tiro, y renunciando a ella en cuanto alguien lo disparaba. Un buen ejemplo para la locura etarra.

5. M. LUTHER KING. Apóstol de la no violencia en la lucha de los negros norteamericanos. Con una fuerza que no era la del Sansón bíblico, sino la del Espíritu Santo, sacudió las columnas del Templo filisteo como el Sansón de antaño. Tanto que no hubo más remedio que acabar con él de un tiro. Puso de moda el género de los "sueños". Y quizá se refería a él Moltmann, cuando escribió que el que sueña puede (o suele) equivocarse; pero en este mundo sólo han conseguido hacer algo los que alguna vez soñaron. No llegó a la meta, pero fue un eslabón considerable en dirección hacia ella. Y todavía no se ha podido acallar el eco de aquellas marchas impresionantes que cantaban "we shall overcome" (venceremos).

6. D. BONHOEFFER. Pastor luterano acusado de conspiración y asesinado por Hitler. Hizo célebre el programa de buscar a Dios fuera del mundo de lo religioso. Y definió que la Iglesia sólo es iglesia de Cristo cuando vive para el mundo. Comprendió en la cárcel que las relaciones de Dios con los hombres no son las relaciones de la Omnipotencia con la debilidad, sino las de Debilidad con la libertad. Le dieron fama sus cartas desde la prisión (editadas con el título programático de "Resistencia y sumisión"). Y todavía hace poco se ha publicado la correspondencia con su novia, que ella sólo permitió publicar cuando vio ya cercana su muerte.

7. E. MOUNIER. Filósofo y sociólogo francés, "maestro" de Alfonso Comín y fundador del llamado "personalismo". Nos lega su concepción de la persona como pieza clave para la construcción de un futuro mejor. Pero aquí sólo viene recogido por dos expresiones bien sencillas, que ya no pueden olvidarse: que "la verdad (aludiendo a la pregunta de Pilatos a Jesús) consiste en ponerse del lado de los pobres". Y que nuestro ordenamiento económico merece el nombre de "desorden establecido".

8. JUAN XXIII. El "papa bueno" y el papa del concilio Vaticano II. Aunque no era tonto, no fue un genio del pensamiento o de la política. Su revolución y sus grandes intuiciones nacieron simplemente del poder de la bondad. En la apertura del Vaticano II dejó claro cuál era el programa con el que intentaba gobernar: la misericordia en lugar del palo, la Iglesia como "iglesia de los pobres", su disensión con lo que él llamaba "profetas de calamidades" y la necesidad de distinguir entre la experiencia última que late en las verdades de fe, y los lenguajes, conceptos o "vestidos culturales" que son necesarios para expresarlas, pero no se identifican adecuadamente con ellas. La curia romana nunca sintió una amenaza tal, ni siquiera cuando se veía como probable un triunfo del partido comunista italiano. Y, aunque no murió violentamente, no se le ha permitido subir a los altares más que acompañándolo de un "guardaespaldas" de extrema derecha, que encarna exactamente la línea contraria de lo que Juan XXIII quería como misión del papado y de la Iglesia.

9. OSCAR A. ROMERO. Arzobispo de San Salvador, asesinado mientras celebraba Misa, por un tirador profesional contratado por el fundador del partido actualmente en el gobierno. Tuvo lo que Santo Tomás llamaba el "instinto interior" de las cosas de Dios, junto a la radical honradez de no cerrar los ojos ante la realidad. Y como le dijo Pedro Casaldáliga en un poema memorable, "el pueblo te hizo santo". En poco más de tres años en el cargo, produjo un fenómeno nunca visto en el mundo católico: los domingos por la mañana las calles de San Salvador aparecían prácticamente desiertas. Pero el caminante podía oír, en todas las casas de la calle, las radios que transmitían la homilía del arzobispo. Muchos domingos, a las pocas horas de acabada la homilía, ya se recibía en el Vaticano una protesta o una denuncia del Departamento de Estado. Soportó una presión sobrehumana, pero rechazó la protección que le ofrecía el gobierno porque "mi pueblo está siendo asesinado y no tiene guardaespaldas". De este "pobre pastor glorioso abandonado por sus propios hermanos de báculo y de mesa", escribió también Casaldáliga, que "las curias no podían entenderle (ninguna sinagoga bien montada puede entender a Cristo)". Pero que, precisamente por eso, "nadie hará callar tu última homilía".

10. NELSON MANDELA. Es el único aún vivo que me permito incluir en esta lista, porque está ya muy viejito y porque no leerá esto. Veintisiete años en la cárcel, para salir de ella sin una gota de odio, tratando de combatir al racismo y al apartheid, no con otro racismo y otro apartheid, sino con la inclusión de todos. Si alguien escribió que "Cristo murió para que se sepa que no todo está permitido", habría que añadir que Mandela sobrevivió para que se sepa que los hombres siguen haciendo aquello que no debería estar permitido: la dominación, la tortura (y hasta el asesinato) de aquellos a quienes ellos consideran como "inferiores".

Al acabar esta breve lista me doy cuenta de que, de los diez testigos, la mitad murieron violentamente. Entre los otros cinco hay una muerte antes de tiempo por su afán radical de compartir la suerte de los peores, y una cárcel de casi treinta años. Temo que este dato constituya una radiografía de esta civilización excluyente de la que tan orgullosos nos sentimos. Enumerando una lista de testigos similar a ésta, la Biblia escribe que "el mundo no era digno de ellos". Podemos añadir también que son ellos los que dignifican a nuestro mundo.

 

 


 

 

Fiscalía General de la República: ¿falsas expectativas?

Más sobre el caso INSEPRO-FINSEPRO

Fiscalía e impunidad. La función de "defensa de los intereses del Estado y de la sociedad" que corresponde a la Fiscalía General de la República (FGR) –según el artículo 193, numeral 1º, de la Constitución Política– no admite regateos y decisiones de conveniencia, según la voluntad e intereses de los grupos poderosos de turno. ¿Lo habrá entendido así el actual titular del Ministerio Público?

En noviembre del año pasado, todo el mundo temía lo peor por la desafortunada experiencia de la elección de Eduardo Peñate Polanco como procurador de derechos humanos. Sin embargo, después del mensaje a la nación del recién electo Fiscal General, Belisario Artiga, se tuvo la sensación de que las cosas iban amejorar. En aquel entonces, el funcionario se comprometió a luchar sin tregua en contra del crimen. También anunció su decisión de trabajar sin compromisos partidistas de algún tipo. Esa mención hizo pensar que el Fiscal estaba consciente de los principales problemas de la Fiscalía y que era consciente de que una de las razones de la impunidad reinante en el país se debía a los criterios políticos que prevalecen a la hora de efectuar investigaciones sobre determinados delitos.

Atisbos de confianza en la Fiscalía. Por ese discurso un tanto franco y atípico en los funcionarios vinculados a la derecha política del país, el sentimiento de que la FGR tendría un papel preponderante en la reforma y confianza, que se debe tener en el sistema judicial, cobraba mayor fuerza. En ese sentido, merece especial mención el papel protagónico que ha asumido Artiga, desde su nombramiento, en el caso del asesinato de la menor Katya Miranda, en abril del año pasado. Las sospechas de que el vínculo de los implicados en el asesinato con el Organismo de Inteligencia del Estado (OIE) y la PNC dificultaría la resolución del mismo –por lo menos en cuanto a participación efectiva del Ministerio Público– quedó disipado por los compromisos inequívocos que ha tomado el titular en este caso. Por otra parte, hay que recordar las diferencias que han salido a la luz pública entre el Director de la PNC, Mauricio Sandoval, y el Fiscal General. Este último denunciaba sin ambages los nexos demasiado frecuentes entre secuestradores y delincuentes de alto vuelo con agentes policiales; asimismo, criticaba una cierta actitud de encubrimiento de sus miembros acusados de delito en el seno de la institución policial.

Sin embargo, es importante señalar la persistencia de algunas deficiencias que, a pesar de los buenos discursos y de la aureola de funcionario ejemplar que el Fiscal se empeña en presentar, no han sido superadas. No ha dado muestras de cumplir con el compromiso adquirido el día de su investidura: velar por los intereses de la sociedad sin importar los colores políticos.

No cabe duda de que la Fiscalía no puede resolver todos los males que aquejan al sistema judicial salvadoreño; ni mucho menos puede, por sí sola, afrontar eficazmente el problema del crimen organizado o la impunidad de la que gozan los criminales de cuello blanco. Este apartado de la justicia depende también de una decisión política que atañe a los gobernantes, pero más que todo es fruto de un consenso nacional sobre la necesidad de combatir la impunidad desde sus posibles conexiones con estructuras estatales. Ello no obsta para que el titular de la Fiscalía asuma su papel de defensor de la sociedad y de baluarte en contra de la impunidad. Y es precisamente en este marco donde se palpa la falta de voluntad de Artiga.

Los límites impuestos por el poder. La promesa de luchar en contra de los delincuentes no alcanza los círculos más selectos del poder establecido. Es lo que ha demostrado el Fiscal en la investigación en el caso del espionaje telefónico. Las diligencias no ayudarán a despejar las dudas en cuanto a la participación del OIE en las escuchas telefónicas. El Fiscal ha sido poco eficiente en identificar los hilos del poder que manejan la intervención telefónica. Al contrario, hasta ahora, la investigación se ha centrado en temas que a todas luces no llegarán a determinar la identidad de los implicados dentro del aparato estatal en las escuchas telefónicas. Tampoco ha obedecido los criterios de imparcialidad en su postura frente a la demanda interpuesta por la UCA, en torno al caso de los jesuitas asesinados. El funcionario decidió desestimar la petición para abrir una investigación en contra de los poderosos, entre quienes se encuentra el ex presidente Alfredo Cristiani, implicados en el asesinato de la UCA. Esta negativa hace sospechar la existencia de motivos políticos, que, una vez más, estarían impidiendo, la consecución de la justicia.

Todo esto ha hecho palpable la poca voluntad de llegar al fondo de las denuncias por parte de la FGR. Por ello no se ve cómo se podrá iniciar un combate frontal a la impunidad que reina en El Salvador. Además, el Fiscal había prometido que en menos de tres meses tendría lista una ley en contra del lavado de dinero; sin embargo, nueve meses después, no hay algún indicio de que se vaya a encarar el problema, mientras no cesan las denuncias de que sigue lavando dinero proveniente del narcotráfico y de secuestros. En conclusón, aún queda mucho por hacer para despolitizar el trabajo del Ministerio Público.

Roberto Mathies Hill: ¿víctima o villano? En los oscuros pasillos donde muchas veces se ha jugado el destino de este país no hay lugar para cualquiera. De eso es consciente Roberto Mathies Hill, pieza fundamental en el velado escándalo financiero que se originó en sus empresas de inversiones FINSEPRO e INSEPRO. Mathies Hill, miembro de la élite más protegida del país, nació y creció dentro del círculo de poderes y prerrogativas que abren y cierran puertas, que dictaminan hasta dónde, hasta cuándo, con qué y hacia quién en la política y en la economía.

Por ello, cuando un periódico nacional le ofreció un espacio privilegiado para explicarse, el ex empresario no hizo más que confirmar lo obvio: que en la resolución de su causa judicial se hallan involucrados más intereses que los que atañen a la mera aplicación de justicia.

El perfil que los periodistas de El Diario de Hoy quisieron exponer a la opinión pública sobre Mathies Hill era una bomba publicitaria casi imposible de desaprovechar. Mostrar de nuevo a la población y a los defraudados del caso el rostro del responsable de una de las mayores estafas cometidas –y hecha pública– en El Salvador implicaba dar vida a un debate que permanecía congelado a causa de los obstáculos conocidos de la justicia. Mathies Hill hizo un buen trabajo abriendo y cerrando las puertas que le darían vida a ese debate. El perjuicio o beneficio que llegue a ganar con este movimiento todavía está por verse, pero sus palabras han animado ya muchas reacciones encontradas, todas ellas señalando con mayor o menor disimulo al culpable de la desgracia o, como bien se lee en las páginas de El Diario de Hoy, a "uno de los catorce".

Las palabras de Mathies Hill se han convertido en un arma de doble filo. Por un lado, el imputado procura llenar algunos vacíos que las investigaciones no lo han conseguido. Así, el ex empresario confirma las presiones que surgieron de parte de altos funcionarios de gobierno, entre ellos el entonces presidente Armando Calderón Sol, para proceder con su empresa de la forma en que se hizo.

Según Mathies Hill, sus negocios, aunque en dificultades, podían salir adelante con un poco de tiempo, que no se le concedió. Por supuesto, ninguna de esas declaraciones despeja las dudas sobre su trabajo en FINSEPRO e INSEPRO, que ahora recaen con más fuerza. Probablemente lo que interesaba al ex empresario era dejar en manos de la justicia la resolución de esos cuestionamientos. A lo que él se dedicó fue a añadir más luces sobre lo que hizo que se le pusiera tras las rejas.

Por otra parte, y mucho más que para tratar de limpiar la imagen de un príncipe que pasó a ser villano, las declaraciones de Mathies Hill se ubican dentro de un conflicto que rebasa la necesidad de justicia legal para un simple imputado. Ese conflicto es, precisamente, el de la justicia social que la clase pudiente de este país necesita para limpiar su imagen frente a la población.

 

 


 

 

Género y Cultura en El Salvador

José M. Tojeira

El fondo de Población de las Naciones Unidas acaba de publicar su informe, titulado "Estado de la población Mundial 2000". Y más allá de los datos generales sobre la población nos ofrece una serie de interesantes reflexiones sobre uno de los problemas más graves de la humanidad: la desigualdad de género. Un problema que atraviesa todos los sectores e instancias, que relega en la vida a posiciones secundarias a la mujer y que incide negativamente en los procesos de socialización de la justicia, los derechos humanos, y mina profundamente los valores de las diversas culturas.

Esta tendencia mundial a supeditar a la mujer al hombre, a pesar de los esfuerzos que se hacen en dirección contraria, tiene su expresión más dura en la violencia por motivos de género. Violencia que no solo constituye una grave violación de la igual dignidad humana, sino que ocasiona terribles pérdidas a las economías nacionales. En Estados Unidos se calcula oficialmente que los empleadores "pierden una suma estimada en 4.000 millones de dólares anuales debido al ausentismo, el aumento de los gastos de atención de la salud, la alta tasa de renovación de la plantilla y la menor productividad". En Canadá el costo de los gastos en salud originados por la violencia de género se calcula en 900 millones de dólares.

Evidentemente en El Salvador no hay un cálculo ni siquiera aproximado de lo que le cuesta al país la violencia de género. Empieza a haber cálculos de los costos en general de la violencia. Pero es evidente que los costos de esta violencia contra la mujer es un freno al desarrollo y un gasto inútil que un país en vías de desarrollo no se puede permitir. Cuando ingénuamente se dice que si vienen inversiones al país todo se va a arreglar, se olvida el trabajo lento y la necesaria inversión en ir creando una nueva cultura que haga desaparecer este tipo de gastos. Si la violencia contra la mujer, no hablemos ya de la generalizada, constituye un gasto proporcionalmente superior al de los países desarrollados por la misma causa ¿podremos tener alguna posibilidad de competir? El dinero no transforma automáticamente la cultura. Hay que invertirlo en cultura para que pueda transformar un esquema de gastos que nos hace escasamente competitivos.

El tema no es sólo el de la violencia, sino el de la marginación sistemática de la mujer en muchos de los aspectos de la vida. El nulo o escaso apoyo al comercio informal, una de las más importantes fuentes de trabajo en nuestro país, afecta especialmente a las mujeres. Cuando se habla de desarrollo y se hacen planes de inversión parece como si el comercio informal o la microempresa no creara riqueza en el país, y como si el gran número de mujeres que trabaja en esos sectores no existieran.

Si pasamos al campo de la política el escenario se repite. Tanto Arena como el FMLN han reducido el número de mujeres en la Asamblea sin que apenas se haya criticado la medida. Algunos varones, especialmente, tienen incluso el descaro de decir que no hay mujeres preparadas para la política. Como si los hombres que participan en ella fueran genios o tuvieran una educación exquisita. Y no se preguntan si la razón real de que muchas mujeres preparadas no quieran participar en política es que, dada su mayor sensibilidad, no quieren entrar en un espacio en el que demasiados hombres se mueven haciendo alarde de un estilo más propio de cloaca o de burdel que de Asamblea Legislativa. Y ciertamente todavía no tienen el coraje nuestros partidos, ni izquierda ni derecha, de proponer que al menos un 30% de los altos cargos del Estado, sean de elección popular o no, estén constituidos por mujeres o por hombres. Si se nos dice en contra de esta propuesta que eso sólo pasa en los países desarrollados, se podría contestar con los datos del informe: De los 9 países que ya tienen el 30% de participación femenina en sus Congresos o Asambleas, 2 pertenecen al tercer mundo.

El trabajo de la mujer está peor remunerado (por qué la maquila prefiere personal femenino si no es por la capacidad de pagar salarios inferiores a los que los hombres suelen exigir), la salud está desatendida (en El Salvador tenemos los índices de cáncer cérvico-uterino más elevados de la región). "En América Latina, nos dice el informe, el aborto en malas condiciones causa aproximadamente la mitad de todas las defunciones derivadas de la maternidad", las relaciones sexuales forzadas y el incesto, no solo dañan sicológicamente la personalidad de muchas de nuestras niñas sino que comprometen su futuro y su productividad económica y social.

Necesitamos a nivel mundial y por supuesto en nuestro país, no sólo acelerar medidas inclusivas de la mujer en todos los ámbitos de participación social, sino construir culturalmente una manera diferente de ser hombre. El machismo presente no sólo en las manifestaciones más escandalosas del maltrato, el abuso y la discriminación en los campos económicos y políticos, debe combatirse con radicalidad. Las pautas culturales que desde la infancia se repiten a niños y niñas deben variar. La repetición religiosa de frases de la Escritura que ponen al hombre sobre la mujer y que son más propias de la época patriarcal que del mensaje liberador de Jesucristo, deben ser analizadas críticamente y no repetidas bobaliconamente en las iglesias.

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La situación de la mujer en el mundo

El Informe de Naciones Unidas, hecho público el 20 de septiembre, afirma que poner fin a la discriminación por sexo es una tarea urgente para favorecer los derechos humanos y aumentar el desarrollo. Ofrece un diagnóstico aterrador de la situación femenina. Al menos una de cada tres mujeres ha sido golpeada, obligada a mantener relaciones sexuales o ha padecido algún tipo de abuso. Un mínimo de 60 millones de niñas que podrían estar vivas han "desaparecido" por los abortos selectivos, el infanticidio o el abandono. "A pesar de los tremendos cambios del siglo XX, la discriminación y la violencia contra las mujeres y las niñas continúan firmemente ancladas en culturas de todo el mundo... Se presta menos atención a sus problemas médicos, se les niegan oportunidades de trabajo y reciben menos salarios que los hombres por la misma tarea. Dos tercios de niños sin acceso a la educación son niñas y dos tercios de analfabetos son mujeres".

"Cada año las mujeres sufren unos 50 millones de abortos, de los cuales 20 millones se practican en condiciones inseguras. A consecuencia de ellos, 78 mil mujeres mueren y millones sufren secuelas. En el caso de América Latina las interrupciones del embarazo practicadas en malas condiciones provocan la mitad de las muertes maternales". El 99% del medio millón de muertes maternales que se registran cada año ocurren en países pobres, donde las complicaciones del embarazo o el parto acaban con la vida de una de cada 48 mujeres. En esas zonas, sólo el 53% de los nacimientos se atienden profesionalmente. La escasa atención a la salud de las madres también repercute en que cada año 8 millones de niños nazcan muertos o fallezcan al poco de nacer.

El sida ya ha infectado a 34.3 millones de personas y ha segado la vida de 18.8 millones. Es la primera causa de muerte en Africa y la cuarta en el mundo. En la zona subsahariana, donde se encuentra el 70% de los infectados, las mujeres cero positivas superan en 2 millones a los hombres. A finales de este año habrá 13.2 millones de niños huérfanos a causa del sida.

130 millones de niñas y mujeres han sufrido mutilaciones sexuales sobre todo en 28 países de Africa, la península arábiga y la región del Golfo Pérsico. La infibulación (extirpación del clítoris y los labios y el cosido casi total de los dos lados de la vulva), supone el 15% del total de los casos. Esta terrible violación de los derechos humanos de las niñas y de las jóvenes se basa en creencias predominantes de que la sexualidad femenina debe ser controlada, y que la virginidad debe ser preservada hasta el matrimonio. El informe afirma que es posible que 5 mil mujeres y niñas mueran cada año asesinadas por sus propios familiares en los llamados "asesinatos de honor". Reciben la muerte por haber sufrido el "deshonor" de haber sido violadas. El problema es más frecuente en los países musulmanes.

 

 


 

 

La monarquía universal

Eduardo Galeano

Ya se desmoronó la cortina de hierro, como si fuera de puré, y las dictaduras militares son una pesadilla que muchos países han dejado atrás. ¿Vivimos, pues, en un mundo democrático? ¿Inaugura este siglo XXI la era de la democracia sin fronteras? ¿Un luminoso panorama, con algunas pocas nubes negras que confirman la claridad del cielo?

Los discursos prestan poca atención a los diccionarios. Según los diccionarios de todas las lenguas, la palabra democracia significa ''gobierno del pueblo''. Y la realidad del mundo de nuestro tiempo se parece, más bien, a una poderocracia: una poderocracia globalizada.

Día tras día, en cada país se van recortando más y más los angostos márgenes de maniobra de los políticos locales, que por regla general prometen lo que no harán y que muy rara vez tienen la honestidad y el coraje de anunciar lo que harán. Se llama realismo al ejercicio del gobierno como deber de obediencia: el pueblo asiste a las decisiones que toman, en su nombre, los gobiernos gobernados por las instituciones que nos gobiernan a todos, en escala universal, sin necesidad de elecciones.

La democracia es un error estadístico, solía decir don Jorge Luis Borges, porque en la democracia decide la mayoría y la mayoría está formada por imbéciles. Para evitar ese error, el mundo de hoy otorga el poder de decisión a los poquitos, muy poquitos, que lo han comprado.

El FMI y el Banco Mundial

En la época del esplendor democrático de Atenas, una persona de cada diez tenía derechos ciudadanos. Las otras nueve, nada. Veinticinco siglos después, es evidente que a los griegos se les iba la mano con la generosidad.

Ciento ochenta y dos países integran el Fondo Monetario Internacional. De ellos, 177 ni pinchan ni cortan. El Fondo Monetario, que dicta órdenes al mundo entero y en todas partes decide el destino humano y la frecuencia de vuelo de las moscas y la altura de las olas, está en manos de los cinco países que tienen cuarenta por ciento de los votos: Estados Unidos, Japón, Alemania, Francia y Gran Bretaña. Los votos dependen de los aportes de capital: el que más tiene, más puede. Veintitrés países africanos suman, entre todos, 1 por ciento; Estados Unidos dispone de 17 por ciento. La igualdad de derechos, traducida a los hechos.

El Banco Mundial, hermano gemelo del FMI, es más democrático. No son cinco los que deciden, sino siete. Ciento ochenta países integran el Banco Mundial. De ellos, 173 aceptan lo que mandan los siete países dueños de 45 por ciento de las acciones del Banco: Estados Unidos, Alemania, Japón, Gran Bretaña, Francia, Italia y Canadá. Estados Unidos tienen, además, poder de veto.

Las Naciones Unidas

El poder de veto significa, en buen romance, todo el poder. La Organización de las Naciones Unidas es algo así como la gran familia que nos reúne a todos. En la ONU, Estados Unidos comparte el poder de veto con Gran Bretaña, Francia, Rusia y China: los cinco mayores fabricantes de armas, que a Dios gracias velan por la paz mundial. Estas son las cinco potencias que toman las decisiones, cuando las papas queman, en la más alta institución internacional. Los demás países tienen la posibilidad de formular recomendaciones, que eso no se le niega a nadie.

La Organización Mundial del Comercio

Hay derechos que se otorgan para no ser usados. En la Organización Mundial del Comercio, todos los países pueden votar en igualdad de condiciones; pero jamás se vota. ''El voto por mayoría es posible, pero no ha sido nunca utilizado en la OMC y era muy raro en el GATT, el organismo que la precedió'', informa su página oficial en Internet. Las resoluciones de la Organización Mundial del Comercio se toman por consenso y a puertas cerradas, que si no recuerdo mal era el sistema utilizado por las cúpulas del poder estalinista, para evitar el escándalo de la disidencia, antes de la victoria de la democracia en el mundo.

Así, la OMC ejecuta en secreto, impunemente, el sacrificio de centenares de millones de pequeños agricultores de todo el planeta, en los altares de la libertad de comercio. No tan en secreto ni tan impunemente, sin embargo: hasta hace poco, nadie sabía muy bien qué era eso de la OMC, pero las cosas han cambiado desde que cincuenta mil desobedientes tomaron las calles de la ciudad de Seattle, a fines del año pasado, y desnudaron ante la opinión pública a uno de los reyes de la monarquía universal. Los manifestantes de Seattle fueron llamados forajidos, locos, despistados, prehistóricos y enemigos del progreso por los grandes medios de comunicación. Por algo será.

 

 


 

 

Ricos y pobres. Insulto y escándalo galopante

Las palabras de Eduardo Galeano son absolutamente verdaderas. Pasando, ahora, de las palabras a los números, veamos el insulto y el escándalo galopante de nuestro mundo.

Las personas más ricas de U.S.A. Ingreso anual por habitante

1. Gates, William H. III, 44 años US$ 63,000 000.000 Ruanda US$ 80.00

2. Ellison, Lawrence Joseph, 56 58,000.000.000 Mozambique 80.00

3. Allen, J" l Gardner, 47 36,000.000.000 Etiopía 100.00

4. Buffett, Warren Edward, 70 28,000.000.000 . Malawi 140.00

5. Moore, Gordon Earle, 71 26,000.000.000 Tanzania 140.00

6. Anschutz, Philip F., 60 18,000.000.000 Burundi 150.00

7. Ballmer, Steven Anthony, 44 17,000.000.000 Sierra Liona 150.00

8. Walton, Alice L.,51 17,000.000.000 Somalia 150.00

9. Walton, Helen R., 81 17,000.000.000 Uganda 190.00

10. Walton, Jim C., 52 17,000.000.000 Nepal 200.00

11. Walton, John T., 54 17,000.000.000 Niger 230.00

12. Walton, S. Robson, 56 17,000.000.000 Bangladesh 230.00

13. Dell, Michael, 35 16,000.000.000 Mali 250.00

14. Redstone, Summer M., 77 14,000.000.000 Kenia 260.00

15. Kluge, John Werner, 86 13,000.000.000 Camboya 287.00

16. Ergen, Charles, 47 11,000.000.000 India 310.00

17. Murdoch, Keith Rupert, 69 11,000.000.000 Bhután 400.00

18. Anthony, Barbara Cox, 77 10,000.000.000 Angola 420.00

19. Chambers, Anne Cox, 80 10,000.000.000 Ghana 430.00

20. Johnson, Abigail, 38 10,000.000.000 ................................................

21. Nicholas, Henry T., 41 10,000.000.000 Holanda 21,970

22. Samueli, Henry, 46 10,000.000.000 Suecia 23,630

23. Schwab, Charles R., 63 10,000.000.000 Alemania 25,580

24. Sidhu, Sanjiv, 43 9,800.000.000 Estados Unidos 25,880

25. Turner, Robert E. (Ted), 61 9,100.000.000 Japón 38,420

Los datos de los millonarios están tomados de "El Diario de Hoy", 22 de septiembre. Los datos del ingreso por habitante están tomados del Almanaque Mundial 2000 (que hace referencia a datos de 1995). El ingreso por habitante es promedio, lo cual quiere decir que dentro de un país unos pocos ganan mucho más y los muchos ganan mucho menos que el promedio. Puede haber imprecisiones de los países nombrados, con algunas omisiones tanto de los países pobres como de los países.

Como queda dicho, los datos expuestos han sido trabajados artesanalmente. Economistas habrá que los cuantifiquen con mayor precisión y los analicen con mayor profundidad. Además, el ingreso no es la única forma de describir pobreza y abundancia. Pero con todo, lo que hemos dicho basta para confirmar que Eduardo Galeano tiene razón. Y, según datos más actualizados, el insulto y el escándalo vana más.

RECUADRO

"La globalización es muy beneficiosa para algunas y es potencialmente beneficiosa para todos, pero sólo si los estados trabajan conjuntamente para que estos beneficios lleguen a todo el pueblo. En contraste, miles de millones quedarán abandonados a la pobreza. Afrontamos desafíos mundiales que nos obligan a trabajar juntos, y si esto es necesario en la esfera económica lo es aún más ante el desafío que representan las amenazas y las guerras". Kofi Annan, secretario de Naciones Unidas

 

 


 

 

20 años del asesinato de Ita, Maura, Dorothy y Jean

Los generales García y Casanova ante los tribunales estadounidenses

Demanda judicial de los familiares. Hace años una imagen de televisión sacudió a Estados Unidos. En El Salvador, unos campesinos desenterraban con cuerdas a tres religiosas y una misionera seglar, las arrastraban, como se hace con ganado cogido a lazo, las pusieron con cuidado sobre el suelo y las cubrieron con ramas para espantar a las moscas. Con rostro que mostraba repulsión, allí estaba Robert White, el embajador estadounidense.

En 1984 cinco miembros de la Guardia Nacional fueron enviados a prisión por haber violado y asesinado a las religiosas Ita Ford, Maura Clark, Dorothy Cassel y a la misionera laica Jean Donovan. De los cinco sólo dos aún guardan prisión. Los otros tres fueron puestos en libertad en 1998 por buena conducta. Pero no terminó ahí la historia. El 10 de octubre comienza un nuevo capítulo.

Ese día, en West Palm Beach, los familiares de las víctimas pedirán a una corte de justicia que condene, como corresponsables de estos crímenes, a dos militares de alto rango: el general José Guillermo García y el general Carlos Vides Casanova, quienes en 1980 eran ministro de defensa y director de la guardia nacional respectivamente. En este caso la sanción es sólo en dinero –los familiares exigirán por lo menos un millón de dólares–. La defensa está en manos de dos prominentes abogados, que harán su trabajo gratis y contarán con el apoyo de America’s Watch, importante institución de defensa de los derechos humanos.

¿Por qué ahora y en Florida? En Florida porque ahí viven desde hace años los dos generales salvadoreños, lo cual es para muchos un escándalo. Mike Donovan, hermano mayor de Jean, dijo en televisión hace unos años: "No puedo creerlo. Mucha gente honrada tiene que insistir y rogar para que le dejen vivir en Estados Unidos. Y a estos asesinos los dejan entrar con toda facilidad. Increible".

Ahora, porque cinco años después del Informe de Naciones Unidas, han ocurrido tres cosas. La primera es que los abogados lograron entrevistarse con todos los asesinos, con excepción de Colindres Alemán. En segundo lugar, en 1998 se tuvo acceso a una cinta secreta con una entrevista de Colindres con un teniente de la Guardia Nacional. En ella Colindres contradecía lo que había dicho antes, a saber, que no actuó bajo órdenes superiores. Finalmente, las familias se enteraron de que García y Vides Casanova estaban en Florida, lo que hacía legalmente posible entablar un proceso contra ellos.

García y Vides Casanova en la actualidad. García, 67 años, ya abuelo, vive en una casa, tipo rancho, en Plantation, con todas las comodidades modernas. El salón de la casa está lleno de flores, esculturas y pinturas de Jesús y de la virgen María. Ha sido acusado por defensores de derechos humanos de ser un asesino sanguinario. Sin embargo, al hablar de su pasado –30 años de carrera militar– el general insiste en que nunca cometió delito o error alguno. Recuerda que el departamento de defensa de Estados Unidos le concedió varias condecoraciones, entre ellas la de la Legión del Mérito por "conducta excepcionalmente meritoria" y por sus "excepcionales servicios" de octubre de 1979 a abril de 1983 –es decir, una de las épocas más sangrientas en la historia del continente–. García se reunía con frecuencia con asesores militares norteamericanos para tratar de conseguir millones de dólares en la lucha contra el comunismo. Insiste en que es absurdo que haya tenido algo que ver con la muerte de las cuatro norteamericanas. El no ordenó los asesinatos ni los encubrió.

Sin embargo, según los demandantes, un mes antes de los asesinatos de las religiosas en una reunión del gabinete, García había dicho que los trabajadores de la Iglesia en Chalatenango –región en las que estaban dos de las cuatro religiosa– colaboraban con la guerrilla izquierdista, y que algo había que hacer con esa gente. De nuevo a la defensiva, García dice que las fuerzas armadas estaban divididas. Oficiales y bases desertaban del ejército para unirse a los grupos rebeldes de izquierda y a los escuadrones de la muerte de derecha. El no podía controlar las fechorías que hacían. Vides Casanova, por su parte, vive en Palm Coast. Los demandantes afirman que había dicho que para frenar un triunfo comunista estaría dispuesto a eliminar de 200 a 300 mil personas, si fuera necesario. Cuando fue preguntado sobre ello, rechazó todo comentario.

Ambos generales fueron puestos en situación de retiro mucho antes de la fecha que les correspondía. García dice que recibió amenazas de la izquierda y de la derecha, por lo cual se fue a Estados Unidos en 1989, donde recibió asilo político sin ningún problema. En el salón en que cuenta estas cosas hay una foto del Papa Juan Pablo II dándole la mano cuando era ministro de defensa. "El Papa me dijo que yo estaba en una situación muy delicada. Y tenía razón". Pero Bill Ford, 64 años, hermano de Ita, una de las cuatro víctimas, escuchó esas mismas palabras en la sala del general García, y llegó a la conclusión de que todo era pura mentira.

Abogados y testigos. Bill Ford es un abogado de prestigio, decidido a proseguir el caso de las cuatro norteamericanas. No ha dejado en paz al gobierno de Estados Unidos, cuyos funcionarios siempre se han mostrado reacios a investigar las muertes. Ha hablado personalmente con los dos generales. "La gente me pregunta por qué no dejar las cosas como están, por qué removerlas después de 20 años". Varias son las respuestas. En primer lugar, las familias de las religiosas siempre han sido vistas por el gobierno de Estados Unidos "como un problema", porque los asesinatos dificultaban la ayuda militar a la maquinaria asesina en El Salvador. Llevar este caso a la corte es una oportunidad para decir y conocer, por fin, la verdad de lo ocurrido. Y en segundo lugar, es bueno que "el pueblo norteamericano sepa que a los carniceros se les permite entrar y retirarse a Estados Unidos". Por último, una victoria legal no significa que los generales tengan que abandonar el país, pero ayudaría a que el congreso apruebe una ley "Anti atrocidad" (Anti-Atrocity) y "Deportación de extranjeros" (Alien Deportation Act). El departamento de justicia podría, entonces, investigar a torturadores, así como investigó a nazis criminales de guerra. (Por cierto, García y Vides Casanova tendrán que enfrentar otro juicio en mayo de 2001 por torturas a cinco ex-salvadoreños).

La línea de la defensa es que "es absurdo que los generales pudieran controlar a todos los miembros de la fuerza armada en tiempo de anarquía total". Además, ya habría pasado el tiempo de poder enjuiciarlos, y el juicio debiera tener lugar en El Salvador. Pero nada de eso ha impresionado al juez T. K. Hurly. El 10 de octubre comenzará la audiencia. Los demandantes han conseguido un permiso especial para mostrar videos y cintas, y hacer uso de computadoras para proyectar cables de noticias y documentos desclasificados por el Departamento de Estado.

Se espera que los testigos de los demandantes testifiquen sobre los escuadrones de la muerte, las cámaras de tortura y las masacres, de las que –aseguran– los generales tenían conocimiento, pero no hicieron nada para parar esas prácticas. Entre los testigos están expertos militares latinoamericanos, funcionarios de Naciones Unidas y Robert White. Este puede testificar que el general García le reconoció que sus soldados estaban implicados en actividades de escuadrones de la muerte, y que los generales tenían conocimiento de las atrocidades, pero no hicieron nada por detenerlos. Los demandantes intentaron en un primer momento que fuese llamado a testificar Alexander Haig, secretario de Estado cuando ocurrieron los asesinatos. Pero, en su lugar, decidieron mostrar al jurado un video con el testimonio de Haig ante el Congreso poco después de los asesinatos. En él Haig dice que le habían comunicado que el busito de las religiosas pasó por delante de un retén, y que pudiera haber habido un intercambio de fuego –afirmación que después probó ser completamente falsa–.

El abogado de los demandantes, Montgomery, espera probar el intento de los generales de encubrir el crimen, dando falsa información al Departamento de Estado. De hecho la identidad de los asesinos fue conocida por la Guardia Nacional a los pocos días del asesinato", escribió Harold Tyler. Los funcionarios de Naciones Unidas pueden testificar sobre la investigación de 1993 que encontró serios fallos en las acciones de ambos generales. El informe de Naciones Unidas concluía que Vides Casanova sabía muy bien que sus hombres de la guardia nacional habían cometido los asesinatos y que encubrió los hechos durante la investigación judicial. Por lo que toca a García, concluía que no hizo ningún esfuerzo serio por investigar exhaustivamente a los responsables de las ejecuciones. La conclusión queda expresada en estas lapidarias palabras de Jim McGovern, congresista por Massachusets. "Pensar que cuatro ciudadanas norteamericanas fueron asesinadas sin el conocimiento de quienes ocupaban altas cargos muestra una ignorancia total de cómo eran las cosas en El Salvador en 1980".

La ley de "protección a las víctimas de la tortura". Los familiares de las religiosas pueden demandar a los generales amparados en una ley federal de 1992 sobre "protección a víctimas de la tortura". Esa ley se puede invocar no sólo contra los actores materiales de los crímenes, sino también contra quienes los ordenaron. Ya ha sido invocada este año para presentar una demanda contra Radovan Kadrazic, antiguo presidente servio-bosnio. En 1992 se usó contra Ferdinand Marcos, el presidente filipino. El jurado pidió una indemnización para las víctimas de 22 mil millones de dólares, aunque después no fue aprobada. En 1995 una corte de Boston ordenó a un ex-ministro de defensa de Guatemala pagar 47.5 millones de dólares a una religiosa norteamericana y a ocho guatemaltecos torturados y aterrorizados por los militares guatemaltecos.

El abogado Ken Hurwitz dice que es prácticamente imposible llegar a cobrar esas cantidades. Pero, añade, "el dinero no es la fuerza que está moviendo el caso... Las familias han luchado mucho y merecen saber lo que realmente ocurrió. Tiene también un valor educativo: que la gente sepa que estos criminales pueden llegar a Estados Unidos y quedarse a vivir aquí".

El juicio será largo para todos: miembros del jurado, abogados y familiares. Estarán allí las familias de las cuatro religiosas, aunque no todos con el mismo entusiasmo. El hermano de Jean Donovan siente miedo de ver el video cuando su hermana Jean y las tres religiosas son arrastradas entre el polvo. El hermano mayor de Dorothy Cassel tiene esperanza: "que el caso ponga realmente punto final a la trágica historia del asesinato de tres religiosas y una misionera en El Salvador hace veinte años. Es duro decirlo, pero puede poner fin a todo esto de una vez para siempre".

(Tomado, en forma editada, de Susan Spencer-Wendel del Palm Beach Post, y Jody A. Benjamin y Jon Burstein del Sun-sentinel).

* * *

Condena de Monseñor Rivera

"Denunciamos y condenamos enérgicamente el secuestro, torturas y muy probable violación y asesinato de las hermanas Maura e Ita de la Congregación de Maryknoll, de la hermana Dorothy de la congregación de las Ursulinas de la diócesis de Cleveland y de la señorita Jean Donovan, misionera seglar...

Los responsables directos se quieren diluir, amparados por un aparato político, militar prepotente, sin embargo, en los casi cuatro años de persecución que sufre la Iglesia, ha sido evidente que la mayoría de los hechos persecutorios los han realizado miembros de los cuerpos de seguridad y organismos paramilitares.

Mientras presenciamos horrorizados e impotentes todos estos hechos, comprobamos que en los medios de comunicación comerciales, en las declaraciones oficiales de las fuerzas armadas y de la Junta de Gobierno, con gran frecuencia se silencian, tergiversan o falsean estos hechos o su interpretación... Responsabilizamos a la Junta de Gobierno, quien por ejercer la suprema comandancia de la fuerzas armadas es responsable de las acciones de sus miembros".

Pronunciamiento del Arzobispado,

diciembre de 1980

 

 


 

 

Carta Pastoral de los obispos de Honduras

El crimen y la violencia alcanzan niveles alarmantes

La Conferencia Episcopal Hondureña ha exhortado a atacar los males del sistema de administración de justicia en vista de que el crimen y la violencia están alcanzando niveles alarmantes, pues abundan los delitos cometidos por bandas organizadas, pero rara vez aparecen los delincuentes. He aquí un resumen de la Carta Pastoral

1. Elementos de diagnóstico

1.1. El crimen y la violencia están alcanzando niveles alarmantes.

1.2. Abundan los delitos cometidos por bandas organizadas, pero rara vez aparecen los delincuentes.

1.3. En los pueblos pequeños y remotos se da el caso de que asesinos y delincuentes circulan libremente por las calles amedrantando a la población.

1.4. La red de seguridad pública cubre únicamente los barrios del centro urbano.

1.5. En las extensas regiones montañosas prevalece casi siempre la ley del más fuerte. Muchas veces se aplica la justicia sólo en contra de los más pobres.

1.6. El poder del dinero es el que decide muchas veces en juicios interminables y dudosos.

"En resumen, podemos decir que la aplicación de la ley deja mucho que desear. Es uno de los problemas más grandes de Honduras".

2. Puntualizaciones específicas

2.1. La manera de elegir los magistrados de la Corte Suprema de Justicia debe cambiar.

2.2. La politización de la justicia no garantiza la igualdad de todos ante la ley, tal como lo establece la Constitución de la República.

2.3. La inmunidad se ha convertido en una salida para que personas que han delinquido puedan quedar impunes. Eso desprestigia a cualquier institución.

2.4. Se buscan diputaciones con el único fin de permanecer impunes ante la ley.

3. Propuestas éticas

Recuperar los valores humanos y cristianos, y vivir apegado a ellos, es una condición necesaria para la convivencia social en paz y justicia. Estamos en una situación que favorece la impunidad y el enriquecimiento ilícito, la falta de confianza con respecto a las instituciones políticas, sobre todo en la administración de la justicia y de la inversión pública, no siempre clara, igual y eficaz para todos" (Ecclesia in América, n. .23). La crisis de valores que se manifiesta en la corrupción pública y privada y en el afán de lucro desmedido, la vanidad, la falta de esfuerzo, la carencia de sentido social, la justicia viva y la solidaridad

4. Recomendaciones

4.1. Que las autoridades gubernamentales estudien y tomen en cuenta las diferentes propuestas elaboradas por la sociedad civil para transformar y mejorar el sistema judicial, comprometiéndose en su ejecución y cumplimiento.

4.2. Que la comisión de Notables de la Reforma Judicial tenga las suficientes garantías de seguimiento para sus aportaciones, sugerencias y recomendaciones.

4.3. Que se continúen los esfuerzos para que se busque la forma apropiada de administra adecuadamente la justicia sin influencia de ninguna clase.

4.4. Que se emita una ley de la carrera judicial que garantice la estabilidad de jueces y magistrados.

4.5. Que se forme un consejo de la judicatura que tengan como función la selección de jueces y magistrados separando las funciones administrativas de las jurisdiccionales, y así pueden dedicarse exclusivamente a impartir la justicia

4.6. Que el nuevo procedimiento para la selección de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia se haga en forma abierta, transparente y con la participación de las autoridades y de todos los sectores de la sociedad.

4.7. Que el Colegio de Abogados ejerza un efectivo control sobre los profesionales del derecho, ya que en contra de algunos hay numerosas quejas que claman justicia.

4.8. Que se revise el sistema de inmunidad de los funcionarios públicos y que este sólo se refiera a sus actuaciones oficiales, evitando así la impunidad.

4.9. Que se cree una comisión con autoridades al más alto nivel y con participación de la sociedad para que vigilen el proceso de implementar, no sólo las medidas de orden judicial, sino las necesarias reformas de las leyes que regulen el sistema judicial.

4.10. Que los profesionales de la comunicación continúen con su misión de investigar, informar y denunciar las injusticias, ya que contribuyen a la formación de la opinión y de la conciencia del pueblo, evitando el espectáculo y escándalo amarillista.

 

 


 

 

Conferencia Nacional de Obispos de Brasil

sobre el compromiso ecuménico de la Iglesia Católica

La presidencia y la Comisión Episcopal de Pastoral de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil en comunión con el papa Juan Pablo II, quien el 18 de septiembre de 2000 –con motivo de la reciente declaración Dominus Iesus de la Congregación para la Doctrina de la Fe– reiteró que "el compromiso de la Iglesia Católica con el diálogo ecuménico es irrevocable", desea reafirmar también su compromiso ecuménico.

Manifiesta a todos los cristianos la estima de la Iglesia Católica que los reconoce justificados por la fe e incorporados a Cristo y los abraza con fraterna reverencia y amor como "hermanos en el Señor". Considera también que "de ninguna forma sus iglesias carecen de significado e importancia en el misterio de la salvación" (cfr. UR). Cree que el movimiento ecuménico, surgido entre los hermanos y hermanas de otras iglesias para restaurar la unidad de todos los cristianos, es obra del Espíritu Santo.

Reafirma también sus compromisos asumidos con las iglesias asociadas en los organismos ecuménicos CONIC y CESE, a cuya constitución contribuyó como miembro fundador. De acuerdo con los estatutos solemnemente firmados, garantiza a todos los hermanos y hermanas que seguirá sentándose a la mesa del diálogo "de igual a igual" en la búsqueda común de la verdad y en el servicio a la humanidad.

Sigue examinando con espíritu atento y sincero lo que debe ser renovado y realizado al interior de la propia familia católica en Brasil para que su vida dé testimonio más fiel y luminoso de la doctrina y de las enseñanzas recibidas de Cristo por medio de los apóstoles.

Exhorta al clero y a los fieles católicos a hacer del ecumenismo una prioridad y a promover todo lo que fuera necesario a fin de que el testimonio de la comunidad católica pueda ser comprendido en toda su pureza y coherencia, superando las incomprensiones heredadas del pasado y estableciendo lazos cada vez más fuertes de recíproca confianza y amistad con los hermanos y hermanas evangélicos.

Consciente de que la reconstitución de la unidad de la iglesia es un don de Dios que nos empuja a seguir juntos por los caminos de la plena comunión, pone su esperanza enteramente en la oración de Cristo por sus discípulos, en el amor del Padre para con nosotros y en la fuerza del Espíritu Santo.

Dom Jayme Henrique Chemello

Presidente de CNB